viernes, 29 de julio de 2022

Deseo de cumpleaños

Esperó la fecha de su cumpleaños, él mismo se preparó la torta y puso una sola vela en la misma, a pesar de cumplir 39 años, pues -según él- tenía solo un deseo.

Luego, apagó las luces de la casa, prendió la vela y disfrutó como alumbraba con fuerza suficiente. Se deleitaba en las formas que el humo formaba en el aire.

Entonces, pidió su deseo y sopló a la llama de la vela. No la apagó, pero su alma salió de su cuerpo por la bica y se abrazó a esa llamita. Tibia, se fundió con la cera.

Se durmió para siempre sin dolor, y su alma, sin prisa alguna, fue subiendo al cielo bailando, haciendo formas en el humo de la vela que se se iba extinguiendo.

Se cumplió su deseo.

1 junio

Velitas

No quiero un "3" y un "9"
tampoco una vela que diga "casi 40"
quiero 39 velitas en la torta.

Las quiero azules y también rosadas,
las quiero de colores y espiraladas,
como la vida misma.

Velas de verdad, de cera pintada.
Velas que se consumen y se apagan,
que humean, como la vida misma.

Quiero prender las velas de a una,
necesito que el humo lleve mis deseos al cielo,
que los lleve de a uno, como la vida misma.

Tengo 39 deseos y menos años.
En muchos de ellos se repiten los nombres,
pueden ser muchas, pero quiero 39 velitas.

1 junio 2022

Cielo estrellado

Noche de 2011,
Areguá,
en el camino de Valle Pucú a Yukyry,
antes de estar asfaltado.

Un corte de luz se hizo alcahuete perfecto
para detener el auto,
apagar sus luces y ver el cielo estrellado,
estrellado de verdad,
ver hasta una estrella fugaz.

Verla a ella.
Ver el brillo de sus ojos
y sonreír sabiendo que ella es un combo:
es la estrella, el deseo y el cielo mismo.

Moneda

La moneda giró en el aire y, al caer sobre mi pecho, quedó con la cara mirando al cielo: mirando sus piernas como rascacielos, a ella en lencería, parada al lado de mi cuerpo acostado, atado.

La cara de la moneda suspiró conmigo al saber que no correría sangre, solo corrió ella. Se terminó de vestir muy sensual y lentamente ,y se fue dejándome atado. Atontado, quería lamer su olor.

Hoy, a 40 años de aquel encuentro, aún conservo la moneda y espero encontrarla: pedirle otra oportunidad, y que tire de nuevo la moneda.

Luna de fresa

Luna de fresa, luna de frutilla,
luna llena, de plata redonda.
Luego oculta, luna de miel.

Luna lunera, luna vinera,
luz de plata, faro de la noche.
Luego oculta, luna de miel.

Y tu, luz de luna, besa mi piel,
aunque luego me niegues
la luna oculta, la luna de miel.

14 de junio

Sol

Sol,
fuente de vida:
me nutres,
me alimentas,
me fortaleces.

Sol,
que a veces te busco y
que a veces me lloras.
Fuente de vida:
a veces me matas.

Puñal

Puñal,
fuerte, que puede proteger
letal, que puede matar-me.

Puñal,
puñal, afilado puñal...

Puñal,
del mundo me defiendes
al tiempo que me lastimas.

Puñal,
puñal, afilado puñal...

Desayunos

Si me acepta los desayunos como poemas,
las media mañanas que a veces le preparo,
no deberé tantos escritos como quiero darle.

La vida no es hacer poemas, sino poesía,
no es decir, es hacer.
Si me acepta, cada noche haremos poesía.

Matemáticas

I
Ella es sabia, pues
hace recuerdos,
que es lo que queda:
la inmortalidad.

II
Cuando hace el amor,
hace que lluevan flores,
más allá de cara, ella es
la memoria, el infinito.

Y aquí las matemáticas:

I+II=III
Ella es sabia, pues cuando hace el amor,
hace que lluevan flores, hace recuerdos, 
que es lo que queda. Más allá de cara,
ella es la inmortalidad, la memoria, el infinito...

La fortaleza

Cuando tengas una pena -decían-
cuéntaselo al río, que la llevará,
no al viento, que la esparcirá.

Obediente de mis mayores
(de los míos, de mi familia,
porque no confío en todos nosotros):

me acerqué al gran río y lo dije:
las mentiras ajenas son lanzas,
quisiera abrazarla, que es mi escudo.

El río se limpió, entonces,
de aceite y otras suciedades
para reflejarme tendiéndole mi mano.

Toqué el agua y fue como
depositar todo el mal, alejándolo,
perdiéndose en la corriente, río abajo.

Sentí que también me fui un poco, 
hecho agua para ir a la fortaleza
y saludarla allá como brisa fresca.

Noviembre 2020

Un testamento

Amada Ailen:

Tengo gripe,
puede que no amanezca contigo.

Quédate con los libros, léelos,
luego déjaselos a tu hermana, que los lea.

Puedes darle mis zapatillas a tu novio,
si no son muy grandes para él.
Que vea que lo quiero, porque te quiere,
y dile que si no lo llevo conmigo
es para que te acompañe aquí, para que conversen mucho.

Dile a ese niño que te quiera y respete,
porque si no, me vuelvo un rato para conversar con él.
Porque los caminos que nos llevan,
siempre,
pueden traernos de nuevo también.




miércoles, 20 de julio de 2022

Amor-Odio

La única relación amor-odio que acepto es con el mate, amo la yerba, odio que me dé hipo.
Por que si me preguntan, las relaciones con amor deben ser amor-amor, como con el tereré.
Solo eso. Saludos.

lunes, 11 de julio de 2022

Hora

Terminamos la reunión como a las 18hs.
Surge la invitación a merendar, que no acepto.

"Es la peor hora para ir en bus", dice alguien.
(de Avda. Aviadores del Chaco a Luque).

"Es la hora", es lo único que contesto, mientras
pienso que la hora en que puedes volver junto
a tu familia siempre es la mejor hora para viajar.